Tanto se dice del regreso a clases, que ya nos hicieron recordar aquellos años en los que nosotros también nos preparábamos para volver a la escuela.
Que si la lavada del uniforme, que si el baño en la nochecita para amanecer frescos, que si el peinado más cool por ser el primer día, aunque el resto ya nos valiera un poco.
La verdad es que regresar a clases ‘en nuestros tiempos’ era todo un ritual, por el que no pudieron pasar los niños de educación básica que comenzaron el ciclo escolar este 24 de agosto.
Y pues como la nostalgia a veces es el algo bonito y hay que dejarla salir, preguntamos a nuestros lectores qué cosas típicas del regreso a clases no pudieron realizar los niños en este inicio del ciclo escolar porque #clases virtuales.
Checa: Después de fallarnos en el regreso a clases, Zoom reestablece su servicio
Estas fueron algunas de las respuestas:
Siempre he pensado que la ‘moda’ en los niños de los 90, la dictaba la barra de telenovelas de las 4 de la tarde.
Aún recuerdo haberle pedido a mi mamá el peinado de Belinda en Amigos X Siempre. Ese que llevaba mucho gel y unos chonguitos raros con cuernitos y toda la onda.
Obviamente en la escuela me mandaron a peinarme bien que porque ese no era un ‘peinado para la escuela’ y pos weeeno.
Estoy segura que no era la única.
tu peinado como Belinda en Amigos X Siempre pic.twitter.com/xPRnoFfHub
— Gabizilla? (@galiebra) March 12, 2017
¿A tus papás les gustaba documentar cada momento de tu infancia? Si es así, seguramente tienes una foto en la que apareces o muy sonriente o enojado de tener que regresar a clases.
Tú, ahí con la mochila llena de libros con un extraño sentimiento de que ya eres niño grande.
Nada como ese bello sentimiento de preparar tu mochila para el día siguiente, ¡luego de meses de estar en un rincón!
Tenemos que decir, que algunos podían comprarse una mochila nueva para el regreso a clases, pero quienes no, se esforzaban en llevarla bien limpiesita o con algún decorado para que luciera genial.
Ese momento en el que el maestro todavía no llegaba el salón, era perfecto para ir al lugar de tu mejor amigo y ponerse al corriente sobre lo que hicieron en sus vacaciones. Cuando llegaba el profe, la promesa era seguir la plática en el recreo.
Contar los minutos para que sonara la chicharra y salir al recreo era de los momentos más chido de todo el día. Al fin ibas a salir al patio a jugar o platicar con tu mejor amiga tooodos los chismes que le tenías guardaditos.
Tu mamá podría hacerte el lunch más rico del mundo, pero ni eso te quitaba las ganas de escaparte a la cooperativa para comprar alguna golosina o antojito. ¿Apoco no?
Había una extraña satisfacción en ver los cuadernos bien forrados sobre el pupitre, verlos en blanco. No sé a ustedes, pero a mí me pasaba que al inicio de las libretas mi letra era más bonita pero con el paso de las semanas la iba haciendo más fea :(.
Una paleta helada, unas frutas con chilito, un chicharrón preparado, una gelatina o lo que fuera. Se sentía demasiado bien comerse algo rico hasta llegar a la casa.
¡Ahh, que buenos tiempos aquellos! ¿Qué otros clásicos del primer día de clases recuerdas?
Para que te quedes otro ratito: ¡Wow! Así son los salones que adaptaron algunos profes para dar clases en línea