Cuando dicen que la música lo cura todo no es una exageración. Así como funciona para sanar un corazón roto también ayuda a que el proceso de sanación de los enfermos sea más efectivo.
Y no lo decimos nosotros, lo dice la ciencia.
Un artículo publicado en la International Journal of Critical Illness & Injury Science (IJCHS) menciona que la música es tan poderosa que logra mejorar el ánimo de los pacientes y disminuir su percepción del dolor.
Te puede interesar: Sentir nostalgia para estar mejor (al menos un ratito): ¡la música es perfecta!
Al estudio de los efectos de la música y su uso para favorecer el bienestar emocional y cognitivo se le llama musicoterapia.
Y el director del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS), Zoé Robledo, dio una muestra al publicar el video de la enfermera Laura Estela García Méndez, quien canta a sus pacientes.
Peeeero antes de eso, tenemos que contarte que no toda la música funciona de la misma forma.
Es necesario conocer los efectos de los sonidos en los pacientes.
La música clásica, por ejemplo, es la más recomendada para pacientes con problemas cardiovasculares, con depresión o trastornos de sueño.
¿La razón? Mejora la frecuencia cardíaca, reduce los niveles de estrés y, por ende, disminuye la percepción al dolor.
En tanto que, si el enfermo escucha su música preferida de la juventud su estado de ánimo mejorará, habrá una mayor motivación e incluso es posible que desee retomar contacto con otras personas. Algo que podría beneficiarlo no solo a él, también a sus seres queridos.
Todo lo contrario que puede pasar si a los pacientes se les da a escuchar música más rápida o agresiva como el heavy metal o algunos géneros de la música electrónica como techno.
“El heavy metal y el techno son ineficaces e incluso peligrosos en medicina de cuidados incentivos. Fomenta la ira, la decepción y el comportamiento agresivo, al mismo tiempo que aumenta el ritmo cardíaco y le presión arterial”.
De acuerdo con el artículo científico, en el caso de los enfermos terminales, se recomienda complacerlos con su música preferida de la juventud, pues le ayudará a recordar momentos agradables e irse en paz.
¿Por qué te contamos tooodo esto de la musicoterapia? Porque, como decíamos al inicio, en México recién pudimos ver un gran ejemplo.
Laura Estela García Méndez trabaja como enfermera en el Hospital Regional Número 110 del IMSS, en Jalisco, y desde hace ocho años sus cuidados han ido más allá de proporcionar atención médica.
Con una voz espectacular, Laura canta a sus pacientes todos los días para que puedan sentirse mejor. Lo que entona son alabanzas, es decir, canciones religiosas para agradecer a dios.
Para respetar las creencias de cada quien, lo primero que hace Laura es pedir permiso para cantar, aunque ella asegura saber a quién y en qué momento proponérselo.
La enfermera Laura Estela García del Hospital Gral Regional No. 110 del @IMSSJalcontigo le canta a pacientes #COVID19 para levantar su ánimo.
La terapia musical ha dado resultados positivos: reduce niveles de ansiedad y depresión.#GraciasPorCuidarnos ?pic.twitter.com/9xtLmfrMfs
— Zoé Robledo (@zoerobledo) May 13, 2020
Sin tener estudios musicales, Laura canta (y lo seguirá haciendo) porque ha sido testigo del impacto positivo de la musicoterapia en los pacientes.
“Los efectos han sido positivos: las personas reducen sus miedos, así como sus estados de ansiedad y depresión, además de liberar emociones que los afectaban”, mencionó a través de un comunicado del IMSS.
Esto lo refuerza una investigación del Instituto Nacional de Salud de Estados Unidos sobre el papel que juega la música en pacientes de cuidados intensivos.
“Los sonidos suaves y no fuertes tienen efectos beneficiosos en los pacientes mientras reciben tratamiento en medicina de cuidados intensivos y reducen significativamente el dolor y el estrés. La música clásica o de mediación suave, silenciosa o tranquila se asocia con la menor necesidad de medicamentos sedantes y una menor percepción del dolor”, dice el documento.
En la lucha contra el nuevo coronavirus no hay forma de permanecer escéptico sobre el poder de la música.
Otro ejemplo es que en este hospital de Nueva York, el Montefiore Medical Center, cada que un paciente de Covid-19 es dado de alta, el personal médico baila y entona “Empire State of Mind“, canción de Alicia Keys.
Lo mismo pasa en el Lenox Hill Hospital, también en Nueva York, donde cada que suena “Here Comes The Sun“, de The Beatles, significa que un paciente de Covid-19 fue dado de alta y puede ir a casa.
Mira este video del medio neoyorkino NY1.
Whether it’s 100, 1,000, or 5,000 patients, NYC hospitals have broken out into ? when someone beats coronavirus and is discharged.
Here’s a look at some of those celebrations helping bring the ☀️ out in grim times.
Video editor: @DanKomarinetz pic.twitter.com/n0uFYxXhe9
— Spectrum News NY1 (@NY1) May 9, 2020
De enfermera a paciente, de enfermero a enfermero, de médicos a médicos o de la forma que sea, la musicoterapia funciona y no se necesita ser un experto en el canto para comprobar sus efectos, mientras se tenga la disposición de enfrentar la adversidad a través de las melodías.