Comparte
Jul 18/2019

No solo es FaceApp: ¿Renunciamos a nuestra privacidad por una foto?

¿Quisiste ver cómo te verías de viejito y ahora temes que hayan vendido tus datos al gobierno ruso? Los últimos días se ha alertado que FaceApp, que retoca y transforma imágenes, podría estar robando fotos y datos de sus usuarios. Pero el problema de la privacidad en Internet no es exclusivo de esta aplicación.

¿Cómo funciona FaceApp?

Faceapp utiliza inteligencia artificial (AI) en conjunto con redes neuronales que van aprendiendo de cada foto que retocan. Es decir, cuanta más gente quiera saber cómo se ve de viejito, más realistas serán las fotos que muestre.

La app no es solo capaz de mostrarte de bebé o de viejo, también puede cambiarte de sexo, o ponerte un hermosa sonrisa aunque en la foto estés más serio que Arturo Herrera al ser nombrado secretario de Hacienda.

Arturo-Herrera-AMLO-Secretario-Hacienda

(YouTube Gobierno de México)

¿Por qué tanto escándalo?

Las alertas respecto a FaceApp se dispararon por dos cosas. Primero, que sus servidores están en Rusia, lejos de restrictivas leyes comunitarias de protección de datos como las de EU o la Unión Europea.

Esto no significa forzosamente que sea una herramienta de vigilancia del gobierno ruso. Pero es cierto que, al igual que China, Rusia es uno de los países que mayor monitoreo tienen de sus usuarios de internet.

Por otro lado, y lo que es más preocupante: su política de privacidad. La redacción es tan vaga y confusa que pocos la leen o entienden.

El texto indica, por ejemplo, que la app “monitorea” la actividad del usuario -como sitios que visita o su ubicación- y que puede “transferir información, incluidos datos personales”, a un país con leyes de protección de datos distintas.

A pesar de ello, la app asegura que no renta ni vende información de sus usuarios a terceros, que no transfiere otras imágenes desde el teléfono a la nube y que borran “la mayoría” de las imágenes tras 48 horas en sus servidores.

faceapp-app-aplicacion-privacidad-datos

(Giphy)

Protección de datos, reconocimiento facial y vigilancia

Lo que toda esta polémica revela es que, pese a los constantes escándalos por el uso inadecuado de datos personales por parte de compañías tecnológicas (ejem… Facebook), muchos usuarios aún no leen o no saben cómo analizar los términos de uso antes de entregar sus datos.

Un debate similar se dio a principios de este año con el #10YearsChallenge. Algunos expertos afirmaron que al publicar fotos de nuestras versiones más jóvenes -además de las actuales- se permitía a Facebook y otras redes desarrollar tecnologías de reconocimiento facial.

El peligro, señalaban, es que esto podría utilizarse tanto para fines comerciales como de vigilancia gubernamental. Ya podemos ver las primeras muestras de esto en China, donde el gobierno lo utiliza para vigilar a ciertos grupos.

faceapp-app-aplicacion-datos-privacidad

(Giphy)

FaceApp no es la única

Al comenzar a utilizar FaceApp, la aplicación solicita permiso para ver tus fotos, enviar notificaciones y activar la cámara de tu celular. Estamos tan acostumbrados a este proceso y queremos nuestra foto de viejitos ¡ya!, que oprimimos ‘aceptar’ a todo, generalmente sin leer los términos de uso o analizar lo que implica dar estos permisos.

El problema es que FaceApp no es la única aplicación con estos riesgos. La gran mayoría de apps y redes sociales tienen políticas de uso poco claras. 

Algunas incluso hacen caso omiso de las peticiones del usuario. Un estudio del Instituto Internacional de Ciencias Computacionales (ICSI) de Berkeley, señala que unas 88 mil apps de Play Store recaban datos a los que los usuarios les negaron previamente el acceso.

faceapp-app-aplicacion-datos-privacidad

(Giphy)

Entonces, ¿qué podemos hacer?

Expertos señalan que lo mejor para garantizar la seguridad es no utilizar estas aplicaciones

Pero… si decidimos usarlas, la mejor recomendación es leer siempre las condiciones de uso, para saber qué estamos aceptando. Al menos, una vez sabiendo esto, podremos tomar decisiones más informadas.