El actor Kevin Spacey y sus empresas deberán pagar 31 millones de dólares a MRC, la productora detrás de House of Cards, por la violación de la política de acoso sexual estipulada en el contrato entre el actor y la compañía.
Luego de múltiples denuncias de acoso sexual contra Spacey, que mostraban un patrón de predador sexual, MRC decidió prescindir de los servicios del actor, además de que debió modificar la última temporada de la serie distribuida a través de Netflix, informó el medio especializado Variety.
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La productora presentó una petición al Tribunal Superior de Los Ángeles para que le fuera confirmada la resolución de las autoridades.
La resolución del árbitro entre ambas partes dicta que Kevin Spacey y sus compañías, M. Proffit Productions y Trigger Street, deben pagar a MRC:
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Después de Harvey Weinstein, en 2017, Kevin Spacey fue de las primeras figuras de Hollywood acusadas de acoso y abuso sexual.
El 30 de octubre, el joven actor Anthony Rapp, quien en ese momento tenía 46 años, acuso a Spacey de haberlo acosado en 1986, cuando sólo tenía 14 años y ya era una estrella adolescente de Broadway.
Rapp relató que Spacey se lanzó sobre él y que logró escapar y refugiarse en el baño del departamento del actor en Manhattan.
Un par de días después, el 2 de noviembre de 2017, CNN informó que Spacey fue acusado de contacto no consensuado con empleados jóvenes de la producción de House of Cards, además de hacer comentarios groseros contra más integrantes del equipo.
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La empresa suspendió al actor y lo sometió a una investigación interna.
MRC determinó concluir el contacto con el actor y sacó del show a su personaje, Frank Underwood.
Sin embargo, para cuando todas las acusaciones salieron a la luz, casi toda la sexta temporada de House of Cards ya estaba escrita y dos episodios ya estaban en producción.
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La empresa tuvo que rehacer esos capítulos y modificar toda la temporada que fue de ocho episodios y no de 13, como originalmente estaba planeada.