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Abr 23/2020

¿En qué ha cambiado nuestro cerebro y cómo logra adaptarse a una pandemia?

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¿Te preocupa que la pandemia de Covid-19 nos lleve a una “nueva normalidad”? ¿Te angustia no saber cuánto cambiará el mundo cuando termine el confinamiento?

Es normal sentirnos preocupados por eso, entre muchas otras cosas, pero tenemos noticias, nuestro cerebro es capaz de adaptarse a todo.

Si no me crees a mí, deberías creerle a Yectivani Juárez Muñoz, maestra en Neurociencias y doctora en Psicología por la UNAM.

“La plasticidad cerebral es la capacidad que tiene el cerebro de reestructurarse ya sea anatómica o neuroquímicamente ante los cambios”, explicó la doctora.

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Pero, como varias cosas, esta capacidad tiene su lado bueno y su lado malo.

“El cerebro aprende de todo, cualquier cosa a la que nos enfrentemos va a hacer que haya cambios en el cerebro.

“Todo aprendizaje para nuestro cerebro es bienvenido porque a final de cuentas implica nuestra supervivencia. Pero hay cosas que pueden hacer que el cerebro cambie también para mal”, explicó Yectivani Juárez.

“En el mejor de los casos, esto que estamos pasando va a prepararnos para otra manera de vida en la que vamos a entender las cosas de manera distinta, a socializar de manera distinta, de forma que va a haber también un cambio social”, dijo.

Pero no podemos negar los efectos negativos que tiene la pandemia sobre nuestra salud mental, por ejemplo…

La repercusión del aislamiento en el cerebro

“Cuando estamos aislados tenemos problemas para procesar información, también nos lleva a una incapacidad de tomar decisiones y a un menor rendimiento intelectual”, explicó Yectivani Juárez.

Así que es completamente normal que haya días en los que no te sientas creativo en el trabajo o concentrado en la escuela.

Pero debemos cuidar que nuestra salud mental no se vea rebasada y acudir con especialistas cuando sea oportuno.

“Cuando el aislamiento es un poco más prolongado, puede ser desencadenante de enfermedades psiquiátricas como esquizofrenia, depresión o ansiedad. No es que el aislamiento lo cause sino que hay personas con cierta predisposición genética en quienes el aislamiento puede ser un desencadenante”, explicó Juárez.

“En última instancia se ha propuesto que estas patologías también son formas en las que el cerebro encuentra la manera de resolver lo que tiene a su alrededor”

“Por ejemplo, en la ezquizofrenia, si este mundo, si esta realidad no me hace sentido pues entonces voy a crear una para mí mismo”, eso es lo que hace el cerebro.

En el caso de la ansiedad: “Yo, probablemente, tengo mucha aprehensión sobre el futuro y mi cerebro lo puede solucionar estando preparado todo el tiempo, hipervigilante, hipersensible, y la persona se adapta a vivir con esa condición”, señaló Juárez, y esto evidentemente no es lo mejor para nosotros.

La doctora también nos dijo que el confinamiento tiene un efecto mayor en jóvenes (niños y adolescentes) porque durante esta etapa el cerebro todavía está terminándose de desarrollar.

“La corteza prefrontal que está enfocada en la toma de decisiones se está formando, entonces en esta etapa nuestro cerebro es muy susceptible a cualquier cambio”, dijo.

¿Lo que está pasando está cambiando nuestro cerebro?

“En experimentos con animales se ha observado que cuando a los ratones los alejan mucho tiempo de otros ratones, se ven cambios en esctructuras cerebrales. Se ve una disminución de la amígdala que es una zona que regula las emociones. Y hay cambios en la neuroquímica del cerebro.

“Conductualmente, estos cambios se presentan como ansiedad. Es como un coctel de cosas que pueden pasar: desde cosas pequeñas como un bloqueo del pensamiento, hasta cambios graves como enfermedades psiquiátricas”, explicó la doctora.

Resiliencia: La clave para que nuestro cerebro triunfe ante la crisis

De acuerdo con Yectivani Juárez, aunque no todos reaccionamos igual ante ciertas situaciones, todos los cerebros tienen la capacidad de ser resilientes.

Esto significa que tenemos la capacidad de salir adelante a pesar de cualquier adversidad.

“Aquí lo importante es agarrarnos de esta resiliencia y cambiar el chip”, señala la doctora. “Está comprobado que si tienes un pensamiento que te dice: ‘sí puedo’, ‘lo voy a lograr’,  el resultado es mucho mejor porque tu cerebro se programa a hacerlo.

“En cambio si estamos pensando constantemente en que nos va a ir muy mal, entonces la plasticidad cerebral se va para el otro lado y pueden empezar a aparecer patologías como la ansiedad”, explicó.

Nuestro cerebro está preparado para sobrevivir en cualquier situación, él buscará la forma

“La adaptación es: ‘en este momento, con lo que tengo, voy a sobrevivir’, en ese sentido nuestro cerebro puede hacer lo que sea”, dijo la especialista.

¿Qué tan bueno o qué tan malo es que nos adaptemos a la vida como es ahora?

“Es una dualidad. Es muy malo que tú te adaptes a una situación de estrés  o de ansiedad y que seas demasiado pesimista, porque esto genera una producción de corticoesterona y afecta directamente al cerebro, así que si tú tienes mucho estrés afectarás funciones del cerebro como el pensamiento,  la memoria, etc.

Entonces, ¿qué hago? ¡Aiuda!

“Yo creo que aquí la clave es no buscar la adaptación constante a una emoción, sino procesar razonadamente lo que estamos viviendo, entender que es un momento muy particular en el transcurso de la historia humana y que tenemos que ver qué herramientas tenemos a nuestra disposición para poder usarlas a nuestro favor”, indicó la experta.

“No se trata solo de ser respondientes sino de esforzarnos por modificar nuestro procesamiento acerca de lo que está pasando”.

¿Qué podemos hacer para que nuestro cerebro esté bien?

A ver, estamos en medio de una pandemia y se trata de hacer lo mejor que podamos hacer con lo que tenemos, como dijo la experta. Y estos son los consejos que nos dio, para que logremos superar esta crisis.

Buscar ayuda cuando la necesites

Si sientes que esta situación es demasiado abrumadora para ti, si no puedes controlar la ansiedad,  alza la mano y busca ayuda de un experto en salud mental.

“Se vale buscar ayuda. Muchos especialistas en salud mental están ofreciendo terapia gratuita o a bajo costo porque sabemos que es una situación particular”, dijo la doctora.

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Pensar en cosas que nos alejen de la adaptación exclusivamente respondiente.

“A final de cuentas tenemos que entender dos cosas: estamos en un momento atípico, así que no debemos sobreexigirnos.

“Estamos en un momento muy particular, hay que tratar de sacar lo mejor de ello. Reprogramarnos. Cambiar de perspectiva ayuda al cerebro”, afirmó Yectivani Juárez.

Sí, leer, hacer ejercicio y meditar ayuda

¿Por qué estas cosas sí ayudan? Porque promueven la plasticidad cerebral.

“Nos puede ayudar cualquier cosa que promueva plasticidad, por ejemplo, hacer ejercicio, leer, meditar, comer bien. Pensar que si tienes la posibilidad de estar en tu casa, no significa que estés encerrado o en peligro, sino a salvo.

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Vivir un día a la vez

Angustiarnos por lo que pasará después de la pandemia no es muy útil para el cerebro. De acuerdo con la experta, es mejor planificar el día a día y tratar de tener rutinas.

“Debemos pensar en qué voy a hacer hoy, centrarnos en el día a día. Vivir un día a la vez, establecer un plan diario de actividades, mantener un orden, a nuestro cerebro le encanta el orden. Tratar de respetar horas de comida y horas de sueño es fundamental”, explicó.

También hay una responsabilidad de los servicios de salud pública

La doctora explicó que por el momento sí, lo importante es salvar el mayor número de vidas posibles. Pero que los servicios de salud pública deben pensar y atender las cosecuencias que tendrá la pandemia en la salud mental de la población.

“Los servicios de salud pública tienen que entender que esto marca un antes y un después, y que habrá algunas personas que quedarán con secuelas en su salud mental después de esto. Es algo que se debe atender”, señaló.

“Pero en general, los seres humanos somos muy capaces de adaptarnos a estos cambios muy fácilmente”, puntualizó.