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Sep 10/2020

Hablemos de suicidio y prevención: las alertas rojas y lo que podemos hacer para ayudar

Foto: Unsplash

Basta de creer que el suicidio es un fenómeno lejano. Basta de ignorar la conversación alrededor del dolor, la depresión, la desesperanza y la muerte. El suicidio es un problema de salud pública.

Según la Organización Mundial de la Salud (OMS), unas 800 mil personas mueren al año por lesiones autoinflingidas y la tendencia muestra que los hombres se suicidan más que las mujeres. 

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Las cifras de México también reflejan esta realidad: 8.9 hombres por cada 100 mil mueren por lesiones autoinflingidas, mientras que esto sucede en 2 mujeres de cada 100 mil, según los datos más recientes del Inegi. 

Hoy, día mundial para la prevención del suicidio, hablemos del tema.

¿Por qué los hombres se suicidan más que las mujeres?

Este fenómeno se conoce como “la paradoja de género en la conducta suicida”. 

La neuropsicóloga y terapeuta cognitivo-conductual Tania Gómez la explica de manera sencilla: aunque la depresión y las ideas suicidas son más frecuentes en las mujeres, los hombres utilizan métodos más letales que concretan el cometido. 

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Y un aspecto sociocultural interesante: a las mujeres se nos proveen más herramientas para expresar nuestros sentimientos, mientras que a los hombres se les restringe. 

No obstante, explica Tania Gómez, esta socialización que tenemos las mujeres no nos protege totalmente.

“El que culturalmente tengamos esta sobreestimulación para poder verbalizar las emociones y los sentimientos es solo el primer paso del trabajo de regulación emocional, por lo tanto puede ayudarte a emprender este camino, pero el solo hecho de la verbalización no te garantiza que puedas prevenir o mantener lejano un suicidio en caso de caer en una depresión grave”. 

Porque, sí, el suicidio está íntimamente ligado a enfermedades mentales. De acuerdo con la organización Voz Pro Salud Mental, entre el 75 y 90% de las personas que lo cometieron padecían algún trastorno mental, en su mayoría, depresión

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¿Y qué es eso de “trabajo de regulación emocional”?

Básicamente es mirar hacia adentro. 

Gómez explica que este proceso incluye diferentes fases. Verbalizar lo que te sucede, ponerle título a los sentimientos e identificar los contextos que te pueden generar emociones como ira, melancolía, tristeza. 

Después, aprender a manejar esas emociones de manera más asertiva.

Por eso la psicoeducación es parte fundamental de la prevención. 

El suicidio, dice la OMS, es prevenible. Al ser un fenómeno multifactorial es necesario “elaborar y poner en práctica estrategias nacionales integrales de prevención”. 

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Hace siete años, la OMS publicó el Plan de acción sobre salud mental 2013-2020, el cual establecía como meta mundial reducir las tasas nacionales de suicidios en un 10% para 2020. 

Señales de alerta

Generalmente, el suicidio no es algo que se planea de un día para otro, es un plan que se cocina lentamente.

“Una persona que contempla el suicidio no es que apenas tenga dificultades en la vida, sino que a través del tiempo se han ido acumulando problemáticas”, dice el psicólogo Cheroky Mena, miembro de la Asociación Mexicana de Suicidología. 

Saber si una persona cercana tiene ideas suicidas puede ser complicado. Mena habla de cambios de conducta drásticos, pero para detectarlos la persona debe ser muy cercana a ti. 

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Estos cambios pueden manifestarse en la conducta, en su aspecto físico y su vida cotidiana.  

Jesús Quezada, médico de la UNAM especializado en Psiquiatría -específicamente en suicidología-, describe los cambios como descuido en el aseo personal, apatía, indiferencia, dejar de comer, trastornos del sueño, irritabilidad, mal humor, enojo. 

Tania Gómez también habla de aislamiento (evitar el contacto con la familia, la pareja, los amigos) y variaciones muy marcadas en el estado de ánimo (un día pueden estar animados y al otro melancólicos y desganados).

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Otras señales preocupantes, según Tania Gómez: hablar de manera recurrente sobre la muerte, de manera directa o no; la compra de algunos elementos como pastillas, sogas o armas; la búsqueda en internet sobre características y métodos; en los hombres, aumento del consumo de bebidas alcohólicas y drogas; en mujeres, el regalo de sus pertenencias y las despedidas que suenan a “no nos vamos a volver a ver”.

“Cuando detectemos uno o varios elementos en conjunto hay que pedir ayuda”.

Y yo, ¿qué puedo hacer para apoyar a mi amix que lo necesita?

“Abrir las orejas como Dumbo. Eso es lo primero, segundo y tercero que pueden hacer. Escuchar el discurso de esa persona, escuchar lo que nos está compartiendo (…) Básicamente es eso: no voy a dar consejos, no voy a filosofar acerca de la situación, mucho menos voy a juzgar el actuar de esa persona, simplemente voy a escuchar”, recomienda Cheroky Mena. 

Pero, ¿hablar del tema…no es fomentarlo? No. 

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Mena explica que escuchar es importante porque a la otra persona le ayudará a disminuir su angustia, ansiedad y confusión por el simple hecho de descargar lo que siente.

Basta de dispersar el tabú y el estigma. “Pregunta, escucha, conecta”.

Y si mi amix no habla del tema, ¿qué hacer?

Jesús Quezada propone este acercamiento: “Decirle ‘noto que te pasa algo; tal vez te sientes mal o tienes alguna preocupación, ¿en qué te puedo ayudar?’”

Para Tania Gómez es importante que al detectar ideas suicidas en ti o en otra persona lo verbalices y pidas ayuda a especialistas. “Quitemos los elementos de resistencia, de tabú; esto es algo que ocurre”.

Aquí dejamos algunos recursos que te ayudarán:

Asociación Mexicana de Suicidología: en este link encuentras los números de ayuda de 12 estados.

Puedes contactar a Jesús Quezada vía WhatsApp en el 55 26901420 o en su consultorio en la calle Cleveland #33 int. 403, colonia Noche Buena, CDMX.

También existen centros o líneas telefónicas de atención psicológica gratuita.

SAPTEL es un servicio telefónico gratuito de salud mental y medicina a distancia. Tienen 30 años de experiencia y dan servicio las 24 horas. Teléfono: (55) 5252-8121.

La Facultad de Psicología de la UNAM también ofrece una línea de atención, aunque esta sólo ofrece servicio de lunes a viernes de 08:00 a 18:00. Teléfono: 5622-2288.