¿Quieres evitar la manifestaciones en la Ciudad de México? Usa bici.
Levante la mano quien no ha cabeceado en el transporte público rumbo a la escuela. Es una práctica común entre los estudiantes porque los trayectos son largos y los viajes nos arrullan. Para evitar los cabeceos, y si te gusta la aventura, puedes usar una bicicleta, porque sí, rodar por las calles de Ciudad de México es toda una aventura.
No necesitas comprar una bicla para moverte, la puedes rentar. Las opciones más populares son Ecobici y VBike, y hoy te presentamos dos opciones que quizá ya escuchaste pero no te has animado a usar: las bicicletas eléctricas.
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Las bicis eléctricas tienen un motor eléctrico que asiste en determinados momentos con el pedaleo, pero no, no es como una motocicleta porque el motor no sustituye la tracción humana, o sea, no hay forma de que te muevas si no estás pedaleando.
También es importante que sepas que aunque sean eléctricas, los derechos y obligaciones de circulación son las mismas que con una mecánica, no quieras rebasar autos, ¡no creas que andas en moto, pues!
Debes circular por los mismos carriles exclusivos para bicis y, según la jerarquía de movilidad urbana, tienes preferencia de desplazamiento; recuerda, solo el peatón tiene mayor prioridad.
Por cierto, sí puedes usarlas aunque llueva.
Estas dos opciones que presentaremos cuentan con un sistema de sellado que impide el paso del agua al motor para no afectar el rendimiento. No, obvio no te vas a electrocutar.
Seguro conoces este sistema de bicicletas públicas de la Ciudad de México, pero ¿sabías que tiene su apartado de eléctricas? Son unas rosas con blanco, un poco más grandes y pesadas.
En el manubrio tienen un medidor que te informa la carga de la bici, los cambios de velocidades y frenos. Fíjate que todo funcione correctamente.
Las utilizas con la misma tarjeta multimodal que las convencionales y las formas de contratación y de uso son las mismas.
El costo anual es de $462 pesos, puedes usarlas durante 45 minutos y en horario de lunes a domingo de 05:00 am a 00:30 am.
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Da clic aquí para conocer los requisitos y dónde registrate.
¡Te cansas muuuuucho menos que con una normal! En el primer pedaleo escucharás el sonido del motor activándose y notarás que la bicla adquiere velocidad; cuidado, porque al principio podrías perder el control.
Una vez que te acostumbras a equilibrar los pedaleos el viaje será más disfrutable. La velocidad máxima es de 15 km/h.
Lo negativo es que sí son más pesadas, será más complicado si en algún momento debes cargarla para cruzar un puente peatonal, por ejemplo, y no hay tantas cicloestaciones.
Descarga la app Ecobici en tu celular para saber si en tu destino existe un lugar para dejar la bici, si no, será todo un dolor de cabeza. La app presenta las cicloestaciones eléctricas con un enchufe.
Pro tip: es importante que al iniciar escuches el sonido del motor asistiendo tu pedaleo y te fijes que esté cargada, porque si no será un viaje tortuoso y cansado -sobre todo porque si la usas descargada los pedaleos son difíciles por el peso de la bici-.
Las JUMP son bicicletas eléctricas de pedaleo asistido. En cuanto a su uso son parecidas a las de Ecobici, pero más fifís.
Tienen un sistema GPS que permite localizar una cercana a ti, un sistema de bloqueo para bajarte de ella y dejarla en donde estés y un sistema de reservación para que no te la ganen.
Para usarlas haz esto:
Para reservar una bici:
Los asientos de las JUMP son per-fec-tos, en serio, se sienten como si estuvieras sentado en un auto; son amplios y tu trasero embonará perfecto.
En cuanto a la forma de viajar no hay una diferencia amplia respecto a las Ecobicis; ambas son equipos nuevos y en buen estado.
Lo cool con JUMP es que puedes dejarlas en cualquier lugar… de la Condesa, Roma, Cuauhtémoc y Polanco.
¿Lo malo? El costo. El banderazo cuesta $10 pesos y a partir de ahí $3 pesos por minuto.
Hicimos una prueba: un viaje de 750 metros de 5 minutos, en el que teníamos que lidiar con el tráfico, costó $25 pesos.
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Pro tip: al terminar el viaje asegura la bicicleta con el candado que viene en la rueda trasera. Toma en cuenta que debes estacionarte sin obstruir el camino de peatones, coches y rampas de accesibilidad. Verifica en tu app que te encuentres dentro de una zona de estacionamiento, de lo contrario te impondrán una multa de $500 pesos.
Contrario a lo que se piensa, sí se hace ejercicio aun cuando andes en una bici eléctrica: se queman calorías y también se suda, aunque la experiencia es más sencilla a la de una bicla tradicional.
El Tiodelmazo, bloguero ciclista, recomienda “pedalear con una bici eléctrica no cargada o simplemente doblar el número de horas que le dedicas o la cantidad de kilómetros, al final acabarás haciendo ejercicio”. Acá puedes leer más.