“Ho ho, hey hey, climate change has got to go!, Ho ho, hey hey, climate change has got to go!” resuena en las calles de Glasgow, Escocia. Tiene un tono melódico, como si se tratara de una canción que conduce a las y los manifestantes, a querer levantar puños, saltar o simplemente moverse.
En español se traduciría como “Ho, ho, hey, hey, ¡el cambio climático tiene que desaparecer!”, pero, por alguna razón, que se grite en inglés lo hace especial.
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No sólo porque estamos en una ciudad británica y porque se realiza en el marco de la Conferencia de las Naciones Unidas sobre el Cambio Climático (COP26), en esta ciudad escocesa, sino porque es un grito dentro de una marcha que exige justicia climática.
Una marcha que reunió a más de 30 mil jóvenes y manifestantes, aunque algunas estimaciones contaron más de 100 mil personas.
Foto: Yanine Quiroz | Animal MX
Básicamente es una demanda que se hace a los países desarrollados como Reino Unido, China o Estados Unidos, para que reduzcan aún más sus emisiones de gases de efecto invernadero (GEI) y ayuden a otros países en desarrollo a adaptarse, ya que ellos son los más responsables del cambio climático.
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El contingente partió a mediodía desde el parque Kelvingrove hasta la plaza principal de Glasgow, llamada George Square, y era evidente la participación de mares de jóvenes británicos, extranjeros y de varios medios de comunicación locales e internacionales.
Durante la marcha, pude ver algunas características que me parecieron interesantes.
Foto: Yanine Quiroz | Animal MX
De entrada, fue claro que la justicia climática fue un tema súper importante para esta Huelga por el Clima, pues delante del contingente estaban representantes de pueblos indígenas de Ecuador, Brasil, Papúa Nueva Guinea, México y otros, así como integrantes de las sedes de Friday’s for Future y otras organizaciones juveniles del sur global (países en desarrollo).
Pude hablar con Mindahi Bastida, del Consejo Regional Otomí del Alto Lerma y vocero del Gran Consejo del Águila y el Cóndor del continente americano, quien comentó que parte de sus exigencias es que se preserve la demarcación territorial de todos los pueblos originarios, pues el 80% de la biodiversidad está en sus territorios.
“Venimos exclusivamente para atender la COP26 de Glasgow. El objetivo es hacernos presentes, traer la sabiduría ancestral para los gobiernos. Estamos llegando tarde, lo importante es proteger la vida”, afirmó el representante de una de las comunidades indígenas de México.
Los pueblos indígenas en la Huelga por el Clima denunciaron que los gobernadores sólo han dado anuncios o discursos, pero deben actuar para proteger a las comunidades originarias pues ellos son los defensores y preservadores del planeta.
En la marcha estas exigencias hicieron eco en niñas y niños, y padres que llevaban a sus hijos y bebés, además de jóvenes con pancartas que decían “COP26 te estamos observando”, “Salva nuestro futuro”, “No hay planeta B”, “Actúa ahora” o “Mi futuro está en la Tierra”.
Algo que sí vemos en México, pero no con tanta participación de menores de edad e incluso algunos de ellos con un pleno conocimiento del cambio climático.
También muchas de sus consignas parecen canciones, son muy melódicas e invitan a moverte. Algunas personas llevaban cubrebocas, pero un buen número ellas no, por lo que en cierto punto sí daba algo de miedo llegar a contagiarte (el fantasma de la Covid-19).
Por otro lado, hubo una gran cantidad de elementos de seguridad, pues decenas de policías se pusieron delante del contingente para “resguardar” a manifestantes y jóvenes del sur global, no dejaban acercárseles y con mucho trabajo podíamos tomarles fotos o hacerles entrevistas.
Foto: Yanine Quiroz | Animal MX
Es claro que todos los países del mundo están sufriendo los efectos del cambio climático, desde el aumento de temperatura atmosférica que conduce a episodios de ondas de calor donde antes no se veían (como España o Argentina), o a incendios forestales que han arrasado grandes extensiones de tierra en Estados Unidos o algunos países de Europa.
Todas las personas estamos viviendo diferentes impactos y contribuimos a emitir gases de efecto invernadero (GEI) que provocan el cambio climático, pero no todos los países tienen la misma responsabilidad en este problema.
Los más desarrollados han sido los que históricamente han sido más emisores por su elevada producción industrial y modelos de consumo.
Por eso, fue importante que el grito colectivo durante la Huelga por el Clima que se realizó el 5 de noviembre, como parte del movimiento Friday’s for Future (sí, el que inició la activista climática Greta Thunberg), exigiera justicia climática.
Porque estamos viendo que jóvenes de Reino Unido, la sede de la COP26, y en general la juventud de Europa e internacional que asiste a Glasgow, se está interesando cada vez más en que sus países desarrollados dejen de contaminar y transiten hacia modelos de producción y consumo más sostenibles, al mismo tiempo que financien y ayuden a los países en desarrollo a adaptarse y volverse más resilientes a los impactos del cambio climático.
Esa es la esencia de las demandas por la justicia climática.
La sociedad salió a tomar las calles de Glasgow para exigir que sus gobiernos sean más ambiciosos con sus compromisos climáticos, pero sobre todo que cumplan sus promesas o compromisos climáticos tanto para reducir sus propias emisiones como para adaptarse.
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Esta cobertura fue posible gracias al apoyo de Climate Tracker
Foto: Yanine Quiroz | Animal MX